Ernő se dió cuenta de lo que había fabricado cuando lo desordenó y trató el mismo de volver a colocarlo en la posición original. Hoy en día lo avala sus más de 350 millones de unidades vendidas, y una enorme cantidad de premios, como una gran prueba, ¿cuántos de vosotros no lo habéis tenido nunca?. La dificultad de éste es muy elevada, aunque bien es cierto que a través de distintos algoritmos -que no dejan de ser pasos para conseguir llegar a una solución- se puede hacer en un tiempo relativamente pequeño. Blanco, rojo, azul, naranja, verde y amarillo son los iniciales, pero existen multitud de variantes, así como cubos más grandes y formas de resolverlo más complejas. El mismísimo Google lo incluyó como doodle en su 40 aniversario animando a que lo resolviéramos en la propia página del buscador -para el que no lo sepa un doodle son esas animaciones que decoran al gran buscador día a día, con un departamento dedicado especialmente para ello.
Y detrás de todo, como no podría ser de otra forma, están las matemáticas, jugando un papel esencial en su resolución. El número de permutaciones posibles es muy grande, tan grande que se va a las 20 cifras, a continuación muestro una captura de Wikipedia donde se ve el cálculo, sin desperdicio:
Y después de ver la enorme cantidad de posibilidades, centrémonos en como llegar a la solución. El record del mundo de la versión "siple" -3x3x3- la tiene el holandes Mats Valk en 5.55 segundos, algo impresionante. Los mejores en resolver este tipo de rompecabezasconocen los algoritmos a la perfección; simplemente con mirarlo unos segundos saben el camino a la solución, aunque les vendes los ojos o lo hagan con los pies (si, existen las dos modalidades). Estos algoritmos varían y no se sabe con certeza cual es el más optimo -hay uno que lo resuelve en 20 pasos-, aunque el más utilizado sigue 7 pasos muy claros:
Primero se ha de conseguir una cruz del mismo color, haciendo que los colores contiguos coincidan con el centro de esa cara.
Seguidamente hay que buscar la cara completa del color de la cruz, respetando los colores contiguos con sus respectivas caras.
En tercer lugar hay que buscar que las aristas (piezas con solo dos pegatinas o colores)coincidan con su capa.
Una vez conseguido esto lo que necesitamos es crear una cruz con el color que falta en la parte contraria a la del paso 1.
Ya que tenemos la cruz hay que volver a hacer el paso dos, conseguir que los contiguos a los bordes de la cruz sean del color de la cara.
Ya solo nos queda hacer que los vértices sean los correctos, es decir, que los tres colores estén en las esquinas (aunque sea descolocado)
Et voilà!, una vez llegado al paso final solo nos queda colocar bien los vertices con cuidado ya que si sale mal tendremos que volver a empezar.
La notación para estos algoritmos es variable, aunque en la más común las letras protagonistas son L, R, U, D, F, y B.L: lado izquierdo R: lado derecho U: cara superior D: cara inferior F: cara frontal B: cara posterior
Una vez desordenado nuestro cubo, se puede calcular este tipo de secuencia para que se resuelva sin pensar lo más mínimo -los que piensan son los que te muestran las letras. Pero antes hay que entender lo que significa cada cosa, ya que no creo que nadie entienda las diferentes ordenes si no se lo explican previamente -por ejemplo, F R' D' R2 U' L2 R B' U R' L' U' L U' F' U F B U B' D' U2 B U' B' D' U F' U F D2 U2 L U2 L' U' L U L' U B' U B U L U' F U F' U' L' R U R' U R U2 R' U F' U2 F B L' B' R B' R B' L B2 R2.
Vayamos por partes, si nos encontramos una sola letra quiere decir que tenemos que girar90 grados hacia la derecha, en cambio, si va acompañada de una (') tendremos que girar hacia el lado contrario, la izquierda. Por último, un 2 nos dice que hagamos el giro dos veces, es decir 180º. Y como imaginamos, calcularlo no es nada trivial y no está al alcance de muchos, se necesita mucha visión espacial y un nivel muy amplio.
Vale, igual es un poco de trampa poner el estado de nuestro cubo en un programa y que el solo nos calcule como resolverlo, pero nos hacen pensar lo grandes que son las matemáticas con un simple cubo, un objetivo didáctico al que igual se acerca más el principio de este invento. Y la solución, sea siguiendo pasos sin nomenclatura (aunque sin saberlo se está realizando un algoritmo secuencial), o calculando los pasos -algo mucho más impresionante- siempre será un simple cubo con todas las caras coloreadas uniformemente, lo que no está tan claro es si se puede conseguir sin seguir ningún tipo de "arte matemático", y más teniendo en cuenta que, como dice un gran amigo mío, la suerte no existe, pero tenemos una probabilidad entre... muchas.
